El verano nos regala luz, energía y oportunidades para disfrutar del aire libre. Pero para las personas mayores, el sol y el calor pueden convertirse en enemigos invisibles si no se toman precauciones. Por eso, desde nuestra ONG sanitaria queremos ofrecerte este contenido educativo: dos video claro, visual y útil sobre cómo afecta el calor y el sol a nuestro organismo con la edad, y cómo podemos cuidarnos.
Con el paso de los años, el cuerpo pierde eficacia para regular la temperatura interna. La sensación de sed disminuye, el sudor se produce en menor cantidad y el sistema cardiovascular responde más lentamente. Esto significa que un episodio de calor intenso puede tener consecuencias graves: desde una deshidratación leve hasta un golpe de calor, que puede poner en riesgo la vida si no se reconoce y trata a tiempo.
Pero no todo es negativo. El sol también tiene efectos beneficiosos, como favorecer la síntesis de vitamina D, mejorar el estado de ánimo o regular los ritmos del sueño. La clave está en exponerse con inteligencia y protección, evitando los riesgos y aprovechando sus ventajas.
En estos videos que te presentamos, se explica de forma sencilla:
- Cómo reacciona el cuerpo de una persona mayor ante el calor y el sol
- Qué síntomas deben alertarnos: sed intensa, mareo, fatiga, piel seca o confusión
- Qué hacer ante una deshidratación, insolación o golpe de calor
- Y lo más importante: cómo prevenirlo
También encontrarás consejos prácticos de protección solar, como:
- Evitar la exposición directa entre las 12 y las 18 h
- Usar ropa ligera, gorros y gafas de sol
- Aplicar protector solar de amplio espectro (SPF 50 o 30 mínimo) en cara, brazos y piernas
- Beber agua con regularidad, incluso sin tener sed
- Permanecer en espacios frescos y ventilados
Este material está pensado tanto para personas mayores como para sus cuidadores, familias y profesionales sociosanitarios. Queremos que los veas, los compartas y los apliques en tu vida diaria.
Recordar que prevenir es más sencillo y barato que curar. Un golpe de calor se puede evitar con un vaso de agua, una sombra o una ducha tibia. Y un paseo al sol, si se hace con precaución, puede ser un beneficio para la salud.
Te invitamos a ver los videos completo. Con pequeños gestos diarios, podemos transformar el verano en una época segura, activa y saludable para todos.
Dentro del Proyecto Salud y Bienestar en personas mayores en soledad, cofinanciado por las Fundación ASISA